Hoy he pasado todo el día con Lil Man. Estuvimos más de 2 horas guiando para llegar al Arecibo Lighthouse & Historical Park con el grupo de padres y chicos de Happy Kids Homeschool. Aprendimos mucho y caminamos mucho. Vimos parques indígenas, barcos piratas, y decenas de tipos de peces y animales marinos en el Acuario. Contemplamos unas vistas espectaculares del norte de Puerto Rico desde el tope del faro. Y nos ensopamos y reímos a carcajadas en el parque acuático “Splash”. En fin, pasé un día inolvidable junto a mi hijo, y acompañada de otros padres que también se disfrutaban a sus chicos a plenitud.
Cuando nos montamos en el carro, Lil Man inmediatamente se quedó dormido, rendido por el sol y el cansancio. A mitad de camino, decidí parar en Dorado a comernos algo. Mientras esperábamos la comida, y con las piernas de Lil Man en mi falda, decidí entrar a las redes sociales desde mi teléfono a ver si me había perdido algo importante durante el día. No estaba preparada para lo que vi: Facebook y Twitter inundados con las noticias de la masacre ocurrida esta mañana en una escuela elemental en Connecticut.
Mientras leía los artículos de los periódicos, los reportajes de los canales de televisión, los mensajes de condolencias y reacciones de mis amistades, y veía las imágenes de niños y padres llorando, y hasta del Presidente Obama perdiendo la compostura mientras se dirigía a los medios, no pude evitar soltar mis propias lágrimas y agarrar a Lil Man y darle un apretón sin ninguna razón.
Pensé en todas las mamás que nunca volverán a ver a sus “bebés”. Pensé en los niños que no tendrán la oportunidad de crecer ni de hacer algún impacto en este mundo. Pero también pensé en mí y en Lil Man. Este incidente me tocó mucho más personalmente que todos los demasiados que han habido en los últimos años. Fue en una escuela elemental; Lil Man está en primer grado (aunque es educado en el hogar). Los niños tenían entre 5-10 años; Lil Man tiene 6 años. No quiero ni pensar cómo reaccionaría si algo así le sucediera.
Sé que muchas madres y padres sintieron lo mismo que yo. El mismo Presidente Obama lo mencionó en su declaración: “Esta tarde, Michelle y yo haremos lo que sé que todos los padres de Estados Unidos van a hacer, que es dar un abrazo a nuestros hijos y decirles que los amamos” (cita tomada de Primera Hora). De repente me di cuenta de algo: cuando yo me enteré de este incidente tan horrible, Lil Man estaba justo a mi lado, y lo pude abrazar en ese mismo instante. Sin embargo, la mayoría de los padres se enteraron mientras sus chicos estaban en la escuela. ¡Qué horror dejar a tus chicos en la escuela por la mañana para luego enterarte de algo así y no tenerlos cerca!
Mis oraciones están con todas las familias afectadas por este incidente, y me solidarizo, no sólo con los padres que perdieron a sus hijos innecesariamente, sino con los padres de aquellos niños sobrevivientes que tuvieron que presenciarlo y que lo llevarán consigo el resto de sus vidas. La realización de que una escuela no sea un ambiente seguro para un niño inocente es algo aterrorizante. Yo sólo espero que algo bueno salga de esta situación. El mundo está demasiado frágil y quebrantado de tantos “cantazos” que ha recibido de parte nuestra propia. Está de parte nuestra nutrirlo, sanarlo, y quizás salvarlo.
Cuéntame: ¿cómo te enteraste de este incidente? ¿Cómo reaccionaste?
Pues yo estaba en casa y casualmente, mis 2 chicos que están en escuela elemental, estaban conmigo, pues hoy no los envié a la escuela. Ahora que lo mencionas en tu publicación, si hubiera sucedido en la escuela de mis hijos, ellos se hubieran salvado. Desafortunadamente sucedió eso que no tiene explicación ni razón.
Te cuento que, yo estaba barriendo la sala y mi nene estaba viendo tele, cuando dieron la noticia, me dio sentimiento y coraje, y el nene me preguntó por qué yo estaba así, que le explicara lo qué había escuchado sobre los niños. Le expliqué y se puso muy sentimental y nos abrazamos.
Me dio tanto coraje que pensé en que, si lo agarraban, al que cometió esa barbaridad, lo debían matar. Yo no creo en la pena de muerte, pues no somos quienes para quitarle la vida a nadie, pero quienes hacen estas cosas no merecen vivir. Y QUE DIOS ME PERDONE.
Luego pensé que así de trastornada debió ser su infancia y adolescencia, tal vez fue una persona que no recibo atenciones ni cariño de sus padres y/o familiares. Sólo Dios sabe lo que hay en la cabeza de ese individuo, y sea lo que sea, NO TIENE JUSTIFICACIÓN NI PERDÓN.
Perdonen el desahogo.
Que Dios los bendiga y proteja siempre.
Ya sabes. Trabajo en noticias y desde temprano estábamos cubriendo el evento. Muy lamentable. Escribí del tema en Baby Center –> http://espanol.babycenter.com/blog/mamas/tengo-miedo-de-perder-a-mi-hijo/
Los apretones, abrazos y besos de mama nunca pueden faltar. 🙁
Esta noticia me dejó muy afectada, Anoche no pude dormir bien pensando en esos angelitos y sus familiares. ¡Es horrible! A mi no me cabe en la cabeza como alguien puede ser capaz de semejante barbaridad. Definitivamente que a cualquier padre se le rompe el corazón nada más de escuchar la noticia. Pido a Dios paz para ellos y para el resto del mundo.
Es frustante y no hay palabras que describan la incertidumbre y dolor de esos padres. Me pongo en su lugar y me aterra el sentimiento. Son gente sin Dios, sin esperanza y con mentes nubladas. ¿Qué podríamos hacer? Nuestro granito de arena en este mundo son nuestros niños y la comunidad en la que vivimos. Criar a nuestros hijos con el cariño y la atención que necesitan de nosotros les dará la seguridad y salud mental que necesitan y les dará las herramienas para seguir cultivando estos mismos sentimientos a sus hijos, familiares y amigos. Es muy triste y desconcertante, de verdad.
Me entere por una alerta de CNN en mi teléfono. Lo primero que hice fue llamar a mi hermana y preguntar si mis sobrinos estaban bien. Ellos viven en CT. Salí tarde de la oficina y llegue lo más rápido posible a buscar a mi hija al colegio y como todos los días llenarla de besos y abrazos. Un te amo no falta en mi hogar. Mi hija y yo nos pasamos diciéndonos que nos amamos y abrazos a diario.