La semana pasada estuvimos enfermos Lil Man y yo. Nada serio, sólo sinusitis que padecemos todos en casa. El problema cuando los chicos se quedan en casa enfermos es que no podemos hacer las cosas que quisiéramos porque obviamente ellos están débiles y no tienen las mismas energías que de costumbre. Y si para colmo nosotras también estamos enfermas, pues se empeora la cosa. Por lo general uno lo que quiere es estar todo el día en la cama, o esas fueron las instrucciones del doctor, pero los niños se aburren fácilmente, y aunque no tengan las energías para jugar o para levantarse, siempre quieren hacer algo.
Aquí te comparto algunas cosas que pueden hacer que no requieren ni tan siquiera salirse de la cama o del cuarto:
1. Tomar medicamentos y mucha agua
Esta es la parte más importante, por razones obvias. Asegúrate de seguir todas las instrucciones del médico en cuanto a los medicamentos, y que se alimenten y tomen mucha agua. La mejor manera de asegurarnos que ellos cooperen con esto es involucrarlos en el proceso. Prepara una tabla con las horas de cada dosis y haz que pongan una alarma para cada una. Puede ser la alarma despertadora del cuarto, o la alarma del celular, o una sencilla de cocina. También incluye en la tabla el agua, que deberían tomarla cada media hora o cada hora, dependiendo de cuán deshidratados estén (pregúntale a tu médico). De esta manera, cada vez que suene la alarma, ellos mismos saben qué es lo que les toca. Añade un sellito o carita alegre cada vez que lo hagan bien. Yo preparé estas tablas que espero que te ayuden. Haz clic en la imagen para bajar.
2. Jugar juegos electrónicos
En mi casa por lo general está prohibido jugar juegos electrónicos los días de clases. Pero cuando están enfermos y no tienen mucho más que hacer, o no tienen ánimos de hacer nada, no encuentro malo darles un gustito para animarlos. Si están muy enfermos, por lo general se cansan rápido y los apagan solos, pero por si acaso, ponles una alarma y explícales desde un principio cuánto tiempo tienen disponibles para jugar.
3. Jugar juegos de mesa o de cartas
Si están de ánimos, jueguen algunos juegos que sean sencillos y cortos. En este caso prefiero los de cartas porque los podemos jugar en la misma cama o en el piso del cuarto. Uno, Skip Bo, Spot it y Memory son mis favoritos.
4. Cuidar a los peluches
Si tus hijos tienen peluches, muñecas o juguetes favoritos, por lo general pasan por las mismas experiencias que ellos. Pregúntales si alguno de sus peluches está enfermo también, y probablemente te digan que sí. Aprovechen entonces y conviertan la cama o el sofá en un consultorio médico u hospital, y hablen de los síntomas y cómo pueden mejorarse. Hagan reglas similares a las que les dio el médico, para que sean ellos entonces quienes los cuiden, y hasta pueden prepararles su propia tabla de medicamentos.
5. Conversar
Nuestros hijos tienen tantas actividades y tareas diarias, que a veces se nos olvida o no tenemos tiempo simplemente para conversar con ellos y escuchar sus historias. Siéntense o acuéstense juntos en la cama (al mío le gusta mi cama porque es grande, jeje) y cuenten historias. Hablen de todo y de nada. Te sorprenderá todo lo que tienen que decir y su gran imaginación.
Y tú, ¿qué cosas haces con los niños cuando están enfermos? Comparte tus ideas y sugerencias en los comentarios para que otras mamás se beneficien.
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